EMPRENDER O MORIR
Los momentos complicados revelan el carácter de una persona, sea que esté lamentándose por la situación pasada, concentrada sólo en el presente sin buscar solución, o bien, entendiendo la situación, aceptando lo que no está en nuestras manos, y afrontar la situación que se vive, buscando soluciones, desarrollando nuestra creatividad.
Y justo así, en momentos complicados, cuando se presentan crisis, se presenta también la oportunidad de generar, de crear, de emprender… emprender “es un acto del pensamiento planificado o concebido para ser accionado hacia objetivos claros de intencionalidad”[1] es decir, se refiere a una acción de riesgo, de atreverse a hacer algo, y evitar permanecer en inacción.
El actual momento que estamos viviendo, ha sido, dentro de la dificultad, la ocasión para emprender. Aquella persona que perdió el empleo, encuentra una forma de generar ingresos haciendo una actividad que quizás no pensaba; y para empresas establecidas, ha sido el reto de reinventarse, de encontrar como permanecer en el mercado y conservar la preferencia del consumidor.
Es verdad, las cifras oficiales reflejan una pérdida de 1.1 millones de plazas de trabajo durante el periodo de marzo a julio del presente año [2] sin embargo, este dato, reporta sólo empleos formales, es decir, registrados en el IMSS, ¿qué pasa con los informales? Muchos de ellos eran ya emprendedores en el mercado informal que ofrecían productos o servicios, y perdieron su principal fuente de ingresos, de ellos se habla de 12.5 millones de pérdida de empleos (formal e informal) [3]
Durante esta crisis de emergencia sanitaria, algunos negocios han sido los más golpeados, por ejemplo, el estado de Quintana Roo, por la baja de viajeros en su momento.
Comúnmente se dice que en tiempos de crisis algunos lloran y otros venden pañuelos, y que la crisis es una oportunidad, y es como debemos tomarlo, ¿qué oportunidades hay?, algunas personas se ocuparon realizando entregas, el reparto a domicilio es una de las actividades que tuvo mayor incremento, las compras en línea, y que decir de pláticas, cursos y capacitaciones vía videoconferencias.
Dentro de esta nueva normalidad, otros negocios adaptaron lo necesario para operar, como el caso de restaurantes que implementaron menús electrónicos, espacio mayor entre mesas, y medidas de higiene al ingresar y en mesas.
Sin dejar de lado la gravedad de esta situación y la repercusión económica que está reflejándose mayormente en algunas ciudades o regiones, no debemos quedarnos en esa situación, y debemos salir adelante, tal vez no te imaginabas emprendiendo una actividad, y hoy lo estás haciendo, tal vez están llegando ideas a tu mente que puedes tomar y poner en marcha. Lo que estoy seguro, es que de esta situación podremos salir adelante haciendo una parte cada quien.
Carlos Gerardo Gutiérrez Martínez
